Historias VOLVER

Andá a lo de Irastorza

Hay alguna gente en esta ciudad, muy pocos en verdad, que hablan con registro de tiempo pasado. O sea, refieren a sitios, momentos y lugares que ya no existen, pero que en su jerga aún están presentes.

Ayer un tipo -que tranquilamente podría haber formado parte de la Peña El Atraso- le dijo a otro, que estaba desesperado porque no encontraba una estación de servicio con nafta y ya le quedaban unas pocas gotas en el tanque del Corsa, ese tipo le dijo si había probado suerte en lo de Bruzzone.

-¿En dónde? -al del Corsa se le nubló la cara.

-Bruzzone, che. España y Rodríguez.

De la gente que conozco, el trío más mentado solía hablar así, como si los años no hubieran transcurrido, como si el tiempo no se hubiera llevado todo puesto, o como si, con plena consciencia de la imposiblidad -la de que el pasado vuelva- decidían invocarlo a través de su iconografía. Gustavo Gentile, Alejandro Fortunato y Daniel Galli formaban parte de la santísima trinidad de la nostalgia. Pero no eran los únicos que mantenían una suerte de tradición loquísima: imagínense si todo el mundo, digamos, todo el vecindario, hablara así, como si el tiempo se hubiera detenido en esa constelación que supe dar el nombre del Tandil de los años felices.

La estación de servicio Avellaneda -que después fue de los hermanos Bruzzone- todavía conserva, aunque pocos, sus nostálgicos adherentes.

Como todo al fin y al cabo va a parar al aljibe del olvido, lo cual está muy bien porque la vida es cambio, el tiempo fluye y el futuro está apurado por convencernos de que lo mejor está por delante -a pesar de tantas señalas en contrario- los últimos sobrevivientes del Lenguaje del Pasado pronto serán eso, pasado, pisado y olvidado.

Pero ayer y hoy también, donde parece que la nafta no ha vuelto, la logia Amigos del Pasado se entretuvo despistando a los vecinos con esa forma de hablar en clave para quienes no tienen en la partida de nacimiento -y ya son más de la mitad de la población- claramente registrada su filiación local. Y, por lo menos, de treinta a cuarenta años de convivencia en la comarca.

Los que peinan canas severas fueron hasta la mitad del siglo pasado, aconsejando a los desesperados automovilistas a donde podían echarle unos litros de combustible al tanque. Uno, jodiendo, le habló del surtidor de la Texaco que estaba en la vereda de la Avenida Colón, a pasitos de España. Otro se vino más para el centro y mentó un surtidor que, también en la vereda, se había instalado sobre calle Rodríguez, pasando España.

Algunos refirieron otras estaciones de servicio definitivamente perdidas, como la que durante bastante tiempo estuvo en la esquina de Chacabuco y Constitución.

Más benévolos, los Amigos del Pasado recomendaron "la estación de servicio de Picabea" y tras el gesto de total y completa ignorancia de los conductores, aclaraban que se referían a la actual YPF de Avellaneda y Bolívar. O la actual Axion, que en los 60 perteneció a Francisco Renis Marzano, apodado el "Diablo Negro", de Santamarina y Sarmiento.

Pero lo mejor, lo mejor de lo mejor, y para darle completa y total verosimilitud fue la mención de una estación de servicio completamente desconocida por la civilización del siglo XX: la del vecino Irastorza.

-Mirá, donde seguro hay nafta es ahí.

-¿Ahí dónde?

-En lo de Irastorza. Estación de servicio, lavado y engrase. Completito el servicio -le dijo el burlón del pasado.

-Vos me estás jodiendo -adivinó el otro.

-No. Está ubicada donde hoy se levanta una de las quince torres de Bértoli. Buscala que por ahí la encontrás.

Harto, el desesperado por tres gotas de nafta siguió su derrotero tras el milagro de una estación de servicio con nafta.

Si hubiera vivido en el Tandil de 1960 habría tenido la solución al alcance de la mano, frente a la Plaza Independencia, sobre Chacabuco entre Pinto y Belgrano, en la actual Torre de las Calas que en el 2000 construyeron los hermanos Oscar y Guillermo Bértoli. Ahí estaba lo de Irastorza, una estación de servicio como la de antes.

Fotografía: gentileza Hilda Ester Cela.

APORTA TU PENSAMIENTO

Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

Últimas noticias

Artículos

Zapatos

28/04/2021

leer mas

Historias

"Bon o Bon", a pedido

08/05/2021

leer mas